Los nuevos teléfonos inteligentes, cada vez con mayores prestaciones de fotografía y de vídeo, incluso con grabación en 4K, hacen prácticamente imprescindible que les dotemos de capacidad de almacenamiento extra para evitar que la fotografía y, sobre todo las tomas de vídeo, acaben por colapsar la memoria interna del aparato y obligarnos en el momento más inoportuno a buscar archivos para borrar con el fin de poder grabar encima otros nuevos.
Aquellos teléfonos que disponen de una ranura micro SD para tarjetas externas – desgraciadamente los iPhone no la tienen- nos permiten solucionar las necesidades de almacenamiento de una forma sencilla y, hoy en día, cada vez más económica ya que el precio del almacenamiento en tarjeta está bajando al tiempo que las prestaciones de estas son cada vez mayores.
He tenido la oportunidad de instalar una tarjeta SanDisk Extreme plus micro SDHC UHS-I en mi móvil. Al ser una tarjeta de última generación aúna una alta capacidad de almacenamiento, la que yo tengo es de 32 GB, con una alta velocidad de escritura de 633 x. La combinación de ambas prestaciones, capacidad y velocidad de grabación, obedece a que esta tarjeta está precisamente diseñada para las nuevas generaciones de teléfonos que vienen con la posibilidad de grabar vídeo en Full HD o incluso en calidad 4 k. Este formato, también llamado Ultra HD, ocupa el cuádruple que el Full HD, y eso hace que necesiten grabar sobre tarjetas con una transferencia de datos muy rápida para que no se pierdan datos al tomar imagen en movimiento a velocidades de 25, 30 o incluso 60 frames por segundo (fps).
Sin embargo, las ventajas de grabar el vídeo y la fotografía tomados con el teléfono en una tarjeta externa como la SanDisk Extreme plus micro SDHC UHS-I no se acaban en el hecho de no colapsar la memoria interna del terminal. Es muy importante también el hecho de que las tarjetas, al ser extraíbles, permiten una transferencia muy rápida de los ficheros obtenidos a, por ejemplo, un ordenador sin necesidad de disponer de cables o de amplio ancho de banda para poder transferir antes los ficheros a la nube.
La SanDisk Extreme plus micro SDHC UHS-I es, a día de hoy, una fórmula 1 dentro de la oferta de tarjetas SD. Técnicamente pertenece a la categoría U3 y eso asegura que es capaz de grabar a una velocidad de escritura continuada de 30MB/s, suficiente para responder al flujo de datos proporcionado por una cámara 4k y, obviamente, por cualquier otra de menor resolución de resolución Full HD o inferior. La tarjeta es también Clase 10, lo que significa que tiene una velocidad mínima de escritura garantizada de 10 MB/s. Por lo que respecta a la velocidad de lectura, los datos de la tarjeta son brillantes con una tasa de transferencia de 95 MB/s lo que permite reducir el tiempo necesario para transferir fotografías y videos al ordenador, siempre que éste disponga de un lector con una conexión igualmente rápida como por ejemplo una USB 3 o similar.
La SanDisk Extreme plus micro SDHC UHS-1 viene acompañada por un adaptador SD en el que se puede encajar la pequeña tarjeta cuando la extraemos del teléfono para introducirla en los lectores normales de tarjetas SD generalmente disponibles en casi todos los ordenadores portátiles.
Por lo que a precios se refiere, el mercado está lleno de precios que difieren entre sí pero en Amazon, que generalmente tiene ofertas muy competitivas en tarjetas, ahora mismo aúna el precio para esta tarjeta y su capacidad de almacenamiento ya tiene 32 GB y la venden por 32 euros.
Si os interesa la tarjeta podéis adquirirla en este enlace: SanDisk Extreme plus micro SDHC UHS-I
